Ah, Gigi Hadid. ¿Hay algo en ella que no sea asombroso? Realmente no es de extrañar que sea una de las modelos más solicitadas del momento: su cuerpo está fuera de este mundo, su apariencia de belleza es legítima y su cuenta de Instagram. Oro puro.
Pero para mí, lo que realmente envidio es su cabello, ese rubio perfectamente ceniciento-arena. He pasado la mayor parte de las últimas semanas deseándolo. Creo que es tan sutilmente hermoso. Y aunque ya amaba mi cabello rubio, me vi obligado a copiar a Gigi como no lo creerías.
Entonces, llamé a mi colorista, Sarah Spratt de Cabello Takamichi en Nueva York. Si pudiera confiar en que alguien en el planeta me llevaría a donde quiero estar, es esta mujer. Y dado el color de mi cabello natural, y por lo tanto las raíces, iba a necesitar manos muy expertas para que me pareciera a Gigi.
Naturalmente, soy morena. Soy lo que más tipos literarios describirían como pelinegro... mi cabello está muy oscuro. Y aunque siempre amé la riqueza de mi color de cabello, también me encanta ser rubia. Eso complica las cosas, porque con un cabello tan naturalmente oscuro como el mío, las cosas corren el riesgo de ponerse cobrizas y anaranjadas.
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Luego, después de que terminaron los aspectos más destacados, Sarah entró y tonificó toda mi cabeza. Y déjame decirte que valió la pena el paso adicional porque el flujo de cumplidos que he recibido desde que salí de ese salón ha sido bastante interminable. Mi cabello es del tono perfecto de arena, rubio sucio. Esas tres horas en la silla valieron la pena. Y la prueba está en el pudín.
Crédito: Foto de Elysia Berman
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¿Línea de fondo? Si desea un color como el de la Sra. Hadid, pero tiene el cabello naturalmente súper oscuro, primero realice el proceso con reflejos y luego haga que su colorista lo tonifique. Y si es posible, intenta que Sarah te coloree el cabello si estás en Nueva York. Si eres como yo, estarás dando cabriolas por la ciudad actuando como si estuvieras en un comercial de champú, ¡y tendrás el cabello a juego!