Todos sabemos eso Julia Roberts es la reina de las comedias románticas. Pero como Julianne, la crítica gastronómica de pelo rizado que busca el amor en 1997 La boda de mi mejor amigoAmerica’s Sweetheart asumió un papel en el que nunca la habíamos visto antes: el antihéroe.

La historia comienza cuando Julianne descubre que su viejo amigo Michael (Dermot Mulroney) se va a casar con una alegre Kimmy de veinte años (Cameron Diaz), por lo que comienza a tramar. Y esquema. Y básicamente, haz lo que sea necesario para sabotear la felicidad inminente de su supuesta mejor amiga después de que ella se dé cuenta de que ella es en realidad con quien él debería caminar por el pasillo.

Desde el comienzo de la película, se suponía que no debía agradarnos. Y, por supuesto, si alguien además de Roberts estuviera en el papel, probablemente no lo habríamos hecho. Pero debido a que ella trajo su encanto inherente, sin mencionar esa sonrisa de megavatios a la parte, nos encontramos alentándola, no importa cuán inofensiva (la parte del karaoke) o atroz (el truco del correo electrónico) sus tácticas fueran romper la Unión.

Y ahora, dos décadas después, todavía lo estamos citando. En el vigésimo aniversario del lanzamiento de la película, contamos todas las razones por las que sigue viva en el salón de la fama de las comedias románticas.