A fin de mes, Stephanie Grisham reemplazará a Sarah Huckabee Sanders como secretaria de prensa de la Casa Blanca. CNN señala que Grisham ha estado con la administración Trump desde 2015, cuando comenzó como asistente, y más recientemente fue primera dama Melania Trump's portavozCNN agrega que mantendrá esa posición). Pero su viaje en la Casa Blanca implica más que solo esos títulos.

Melania anunció el nombramiento de Grisham en Twitter después de semanas de especulaciones. Tan pronto como Sanders, quien deja su puesto para regresar a Arkansas y pasar más tiempo con su familia, anunció su partida, el nombre de Grisham fue uno de los primeros en ser arrojado como Sanders reemplazo. No será la primera vez que Grisham trabaja en el departamento de prensa. En 2016, fue adjunta del exsecretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer. Incluso antes de poner un pie en la Casa Blanca, Grisham tenía aspiraciones políticas y trabajó con la campaña de Mitt Romney en 2012.

Después de trabajar para Spicer, Grisham se trasladó para servir como subdirectora de personal, directora de comunicaciones y portavoz de la primera dama, un puesto que la vio

escribir artículos de opinión para CNN. Gente señala que, a diferencia de Sanders, la posición de Grisham en el ala este le permitió evitar gran parte de la controversia que se lanzó contra su predecesora, ya que se centró en cuestiones no partidistas. Sanders tuiteó palabras de aliento a Grisham después de que se conoció la noticia de su nuevo papel.

El nombramiento de Grisham coincide con la propensión general de Trump a contratar personal que ya está cerca de él. Ocupó muchos puestos en 1600 Pennsylvania Avenue, pero más que eso, ha demostrado ser leal a la administración y, señala CNN, una confidente tanto del presidente como de la primera dama.