Acuéstese boca arriba con los brazos y las piernas en el aire. Empuja las costillas hacia el suelo y relaja el cuello. Con una inhalación, extienda la mano izquierda y la pierna derecha lo más lejos posible una de la otra. Exhala de regreso al centro y alternando los lados. Recuerde: ¡las caderas no deben moverse!
Acuéstese sobre su lado izquierdo con la rodilla derecha en el suelo y por encima de las caderas. Lleve su mano derecha hacia la pared detrás de usted y mantenga su rodilla izquierda en el piso. En esta posición abierta, relaje completamente la respiración y hunda el torso en el suelo.
Párese lo más alto que pueda con las manos en el pecho y apriete los glúteos. Da un paso con la pierna derecha hacia adelante mientras bajas la rodilla izquierda hacia el suelo. Empuje su pie derecho a través del piso y párese erguido.
Desde una posición de tabla, lleve su pie derecho hacia el exterior de su mano derecha. Empuje hacia abajo con su mano izquierda y alcance su mano derecha hacia el cielo, los ojos lo siguen. Lados alternos después de cada respiración completa.
Cómo: Póngase de rodillas y siéntese tan alto como se sienta cómodo. Pon tu mano derecha sobre tu espalda y tu mano izquierda sobre tu corazón. Inhala para expandir ambas manos, exhala para acercarlas. Repetir.
Sobre las manos y las rodillas, levante las rodillas una pulgada del suelo. Con un núcleo apretado, exhale para empujar su pierna derecha lo más atrás posible detrás de usted. Alterne colocando su comida derecha en el piso y pateando su pie izquierdo hacia atrás.
Comience en una posición de perro hacia abajo y empuje las caderas hacia el cielo con una exhalación. Mientras inhala, deje caer las caderas al suelo y empuje el pecho hacia adelante. Camine con las manos hacia atrás a una sentadilla profunda y repita.
Acuéstese boca arriba con las rodillas dobladas y los pies apoyados en el suelo. Empuja la zona lumbar hacia el suelo y aprieta los glúteos. Con una exhalación, levante las caderas lo más alto posible del suelo y sosténgalas.