Olivia Wilde está igual de obsesionado con jennifer coolidge como el resto de nosotros. Después de compartir una selfie en blanco y negro con el ícono (y el título "Oficial de Instagram") del famoso Feria de la vanidad Fiesta posterior a los OscarA Wilde le encantó tanto que lo publicó dos veces y lo movió a su feed principal.
La imagen captura a un Wilde sonriente posando junto a Coolidge, que frunce los labios. En su pie de foto, Wilde bromeó diciendo que estaba lista para dar un paso más y tener la foto entintada en su cuerpo. "Mover esta foto a la cuadrícula y luego a un tatuaje en el pecho, lo más probable", escribió.
Wilde también compartió una gran cantidad de otras imágenes de su rollo de cámara que tomó en el evento anual repleto de estrellas. Sarah Paulson, Donald Glover, Holland Taylor, Gabrielle Union, Emily Ratajkowski, Rita Ora y otros hicieron su resumen.
Para la noche más importante del año en Hollywood, Wilde lució un
diminuto sostén de cuero negro debajo de su vestido color marfil de un solo hombro, increíblemente escotado de Gabriela Hearst. Combinó el vestido que rozaba el suelo con una gargantilla de diamantes y aretes colgantes con flecos, así como rizos sueltos con raya al medio y un ojo de gato ahumado.La semana pasada, Wilde asistió a un evento previo a los Oscar, donde su no te preocupes cariño La coprotagonista Florence Pugh (con quien ha supuesto problemas) también estuvo presente. De acuerdo a Página seisfuentes de, las dos estrellas “mantuvieron la distancia entre sí” y “no fueron fotografiadas en ningún momento de la noche saludándose o festejando juntas”. La actriz ha abordado la disputa, han circulado rumores de que no se llevaban bien durante el rodaje, además de la lista de lavado de la película ("eso se siente como una película") de presunto drama en el set.