Naomi Campbell es sin duda uno de los mejores modelos de todos los tiempos, pero ese estatus viene con su propio bagaje. A lo largo de su paso por la pasarela y frente a la cámara, Campbell parecía tener una reputación anterior a su grandeza, y en el nuevo documental de Apple TV+ Las supermodelos, habló sobre cómo ser percibida de cierta manera obstaculizó partes de su carrera mientras trabajaba y, más específicamente, como modelo negra.
"Era difícil ser una mujer negra franca y definitivamente recibí el bastón muchas veces", dice en el tercer episodio de la serie. Campbell recordó un incidente que ocurrió después de que ella cambió de la agencia de modelos Ford a Elite. Junto al fundador de la agencia, John Casablancas, se dirigió a una sala llena de ejecutivos y exigió igualdad salarial.
"Pero cuando me dijeron lo que querían pagarme, dije que no delante de toda la sala. Dije: 'Me pagan eso en Tokio en un día, ¿por qué iba a aceptar eso por un contrato por un año?'", compartió sobre una reunión en Revlon. También dijo que sabía lo que les pagaban a sus homólogos y que no aceptaría ganar menos que sus compañeros.
"John se sintió muy avergonzado y luego decidió llamarme 'difícil'. Y entonces decidió que iba a ir a la prensa y decir que yo era difícil y que me despidió", añadió. "En primer lugar, dejemos esto claro. Los modelos no pueden ser despedidos. Somos autónomos. Patrocinado por nuestras agencias."
El episodio también incluyó un clip de Campbell hablando sobre Casablancas en un programa de entrevistas y diciendo: "Era muy indigno. Se puso muy desagradable, lo cual personalmente sentí que era solo explotación porque sabe que mi nombre aparecerá impreso en el periódico y será un gran tema de prensa para Elite. Pero no tengo nada que decir sobre él. Creo que su comportamiento fue totalmente indigno".
En Las supermodelosCampbell reflexionó sobre el incidente y cómo afectó su carrera.
"Ese estigma de sus palabras y su declaración a la prensa arruinó mi trabajo durante muchos, muchos años. He oído "loco", he oído "pesadilla", he oído "difícil". Me llamaron difícil porque abrí la boca. Punto", dijo.