Después de meses de especulación, anticipación y, sorprendentemente, ni un solo vaso de Starbucks deslumbrado relacionado con la NFL (ha estado blandiendo un opción negro y plateado), Jennifer López subió al escenario en el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl LIV. Cuando la noticia fue anunciado el año pasado, los fanáticos de todo el mundo se preguntaban cómo López y su coprotagonista, Shakira, infundirían al espectáculo su estilo característico, sus movimientos de baile característicos y su sentido único de estilo personal.

Ninguna superestrella decepcionada, Shakira inició el espectáculo con un minivestido brillante de dos piezas, mostrando su famoso batido "Hips Don't Lie" y tocando sus canciones emblemáticas como "Whenever, Wherever".

J.Lo luego salió con "Jenny From The Block", "Ain't That Funny" y "Get Right" con un look de cuero completo. Ella trajo a un invitado muy especial con su hija Emme agarrando el micrófono para actuar también.

Además de López y Shakira, los "invitados adicionales" que mencionó el experto de la NFL de ESPN, Adam Schefter, trajeron su propio fuego. Los cameos de Bad Bunny unieron toda la actuación.