El ajetreo se ha convertido en una insignia de honor. Somos adictos a su zumbido porque, bueno, estar en demanda se siente bastante bien. Y trabajar y vivir rápido nos hace sentir productivos incluso cuando no lo somos.

Mucho de eso se reduce a cómo funciona nuestro cerebro. El cerebro usa un enorme 20% de la producción total de energía del cuerpo. Nuestro cerebro consciente es una máquina de procesamiento fantástica. Es brillante para aprender cosas nuevas a partir de los primeros principios, pero consume bastante poder.

RELACIONADO: 8 formas de hacer frente al trastorno afectivo estacional

También es una máquina inteligente, razón por la cual conserva energía usando nuestro subconsciente, o como me gusta llamarlo, piloto automático, siempre que sea posible. Observa lo que tenemos frente a nosotros, busca situaciones que parecen familiares para las que ya conocemos y sigue las instrucciones predeterminadas para que nuestro cerebro consciente pueda descansar. Es por eso que podemos conducir largas distancias sin recordar grandes tramos del viaje (piloto automático literal).

click fraud protection

Este es un diseño fantástico, pero a medida que nos sobrecargamos cada vez más, el piloto automático se activa con más frecuencia para ayudar a nuestro cerebro a sobrellevar la situación. Incluso cuando no lo necesitamos, como esos momentos en los que, si logramos abrir los ojos, podemos sentirnos conscientes, alegres y parte de algo más grande.

En estos tiempos políticos, sociales y económicos inciertos y de rápida evolución, es fundamental hacer una pausa y buscar una forma de sentirse más consciente y vivo. Cuando somos más conscientes, tenemos muchas más posibilidades de ver positividad en nuestras vidas y de tomar mejores decisiones que nos ayudarán a sentirnos más felices y comprometidos con el mundo en el que vivimos.

RELACIONADO: 7 maneras fáciles de aliviar el estrés del cuello ahora mismo

¿Cómo despertamos a la conciencia y aún manejamos nuestras ocupadas vidas? escribí Despierta! en un intento de responder a esa pregunta. El secreto para encontrar este equilibrio es experimentar con experiencias nuevas y ricas que atraigan nuestra atención y nos ayuden a comprendernos a nosotros mismos y a nuestro entorno. El comediante George Carlin llamó a esto "vuja dé": una sensación de desconocimiento en lo familiar. Al estimular nuestras mentes para que cambien su perspectiva, revelamos oportunidades que no necesariamente habíamos visto antes. Para comenzar, introduzca los siguientes seis ejercicios en su vida, uno por uno durante un período de unos pocos días, o sumérjase como le parezca adecuado. No están pensados ​​como otra casilla en tu lista de tareas pendientes, sino como un poco de diversión despierta para agregar a tu día.

Chris Baréz-Brown es orador, experto en bienestar y autor de Wake Up!, publicado por The Experiment Publishing.

Bailar no solo es divertido, sino que se ha demostrado una y otra vez que nos impulsa física, mental, emocional y espiritualmente. Elija un momento de su día que se adapte a usted y una melodía que le dé ritmo, y piérdase con la música. ¡Solo o con otros, está garantizado que te ayudará a despertar!

Esta es una de mis formas favoritas de ayudar a centrar nuestra atención selectiva para ver más positividad. Todos necesitamos una conexión humana significativa en nuestras vidas para nuestro bienestar. Es lo que nos hace humanos. Encuentra una persona al día y comparte qué es lo que amas de ella, por pequeña que sea. Las cosas grandes a menudo tienen comienzos pequeños.

Nuestra obsesión por el consumo está destruyendo lentamente no solo nuestro planeta sino nuestra felicidad individual y colectiva. Es un indicador clave de que vivimos en piloto automático. Compramos cosas para evitar conectarnos con lo que realmente cuenta en nuestras vidas. Durante un período de cuatro días, experimente permitiéndose comprar solo alimentos y agua (excluyendo viajes y suministros médicos esenciales). Vea si esto le ayuda a despertar al mundo que lo rodea.

Hace un siglo, solo el 10 por ciento de nosotros tenía trabajos sedentarios. Ahora, ese número está más cerca del 90 por ciento. Sentarse todo el día se ha convertido en el "nuevo fumar"; está causando problemas de salud en todo el mundo. Piense en las formas en que puede hacer que su cuerpo se mueva con regularidad durante el día, ya sea una caminata rápida alrededor de la cuadra o un escritorio improvisado para usar de manera intermitente. Incluso pequeñas cantidades de movimiento regular nos ayudan a involucrar nuestra mente consciente.

Ahora revisamos nuestros teléfonos en promedio 1.500 veces a la semana y con esta adicción viene la desconexión de las personas que amamos. Escribe una carta a alguien especial y explícale por qué estás agradecido de que esté en tu vida. ¡Es una forma de comunicación simple pero olvidada que tiene un impacto poderoso! Hágalo una parte regular de su vida y vea cómo afecta su bienestar.

El tiempo no tiene por qué gobernarnos. Los calendarios y las notificaciones en línea hacen que sea muy fácil para nosotros apagar y vivir en piloto automático. Nos apresuramos de una cita a otra, sin disfrutar realmente del viaje, simplemente contando nuestros logros. Cada día de esta semana, recupere algo de tiempo de su agenda. Eso podría significar cancelar una reunión o evento social o pedirle a un amigo que lo ayude con una tarea. El secreto para hacer que esto funcione es llenar el espacio con cosas que realmente sean para ti. Esto nos ayuda a prestar más atención a lo que cuenta, no a lo que grita más fuerte.